lunes, 30 de enero de 2017

"SIGNIFICANTES" de DANIEL DESPOTHUIS


"Significantes"


Del 3 al 28 de Febrero de 2017


Inauguración: Viernes 3 de Febrero a las 20:00h.



“Presencia contemporánea”

La Galería O+O presenta, en esta exposición, la obra de Daniel Despothuis, nacido en 1949. Autodidacta, estudia la técnica de la pintura realizando obras figurativas. Durante este aprendizaje su búsqueda, sin embargo, no se limita a los aspectos teóricos y prácticos; su mirada se dirige ya a lo que se encuentra más allá de los objetos y temas que pinta, queriendo franquear las apariencias para aprehender sus “verdades”. Esto no satisface no obstante su voluntad de descubrir los “misterios”.
Su encuentro con Yolande Leger le permite profundizar la psicología del arte abstracto y abrirse al arte contemporáneo como lo deseaba. Desde entonces no deja de estudiar, trabajar y explorar espacios infinitos entre silencios misteriosos y simbolismo del universo. Sutil observador del mundo circundante, expresa con técnicas, materiales muy variados y heterogéneos, las transformaciones, perplejidades y dudas y la miseria espiritual en la cual se ajetrea la sociedad contemporánea.
La elección de los temas de un recorrido en las misteriosas moradas del espíritu; la seducción del misterio, la inmanencia del símbolo, las proyecciones psicológicas son las referencias porque la dominante del motivo lírico sabe transmitir e implicar al espectador.
Daniel Despothuis emplea elementos de recuperación (tejidos, sacos de yute, madera, hierro, clavos, etc…) Estos objetos están cargados de su propia energía, y de la proyección psicológica que le transferimos. Su conjunto que puede parecer heteróclito, por su composición particular, da al cuadro una energía única, global, que perturba al espectador y le abre las puertas de campos insospechados. La finalidad de su trabajo no es representar o describir algo sino ser “algo “, un objeto cargado de energía mental que el artista le incorpora para provocar en el espectador una emoción y crear un intercambio, una resonancia que revela por efecto catártico una parte escondida de su personalidad.  Ocurre lo mismo con los trazados caligráficos, trayendo una energía, un soplo vital, una fuerza, perturbando la posible certidumbre del espectador. Como dicho anteriormente la expresión supera a la representación o toda otra forma de compromiso estético.
Las obras de Daniel Despothuis son vectores de memoria, a la vez personal y universal; memoria que no permite “ser”, arraigarnos en una historia, enfrentar el mundo en su complejidad y sus dramas. El artista detiene este poder que consiste en transcender sus heridas a fin de ofrecer a sus congéneres llaves, pistas para aprehender el espacio que le rodea.
En las obras de este artista se manifiesta una dualidad entre la interioridad y el estrépito del mundo, conflicto que halla su equilibrio en la realización, en una ejecución tan particular y propia. Una diferencia, marcada, y sin embargo complementaria en el discurso subyacente.
Sus obras expuestas en numerosos países han sido premiadas. A través del arte que practica y movido por procesos simbólicos inconscientes, Daniel Despothuis manifiesta una creación impregnada de frescura y vigor, punto de partida de un viaje maravilloso que nos lleva más allá de nosotros mismos.

domingo, 8 de enero de 2017

PENSAT I FET de XAVIER RAVENTÓS


"Pensat i fet"


Del 13 al 31 de Enero de 2017

Inauguración: Viernes 13 de Enero a las 20:00h.




Mi escuela escultórica 
Mi escuela escultórica, ha sido la fotografía. Porque, de lo que no hay duda, es que fotografiar es manipular.
Delante de ti, tienes una realidad, y lo que haces es manipularla con lo que tienes a mano, que es la cámara. Con la perspectiva, la profundidad de campo, el encuadre, etc. Y con lo que te ofrece la naturaleza, o la técnica, como es la luz, la climatología, o las ópticas, velocidad de obturación, etc. Antes con el revelado y el retoque manual, y ahora con la postproducción digital. Hay que tener ojo rápido y saber unir técnica y creatividad. Sacar el máximo en el mínimo tiempo, y entonces tienes una  buena fotografía.
Y con la escultura “d’objets trouvés”, pienso que es lo mismo. Hay que tener la habilidad de ver y escuchar lo que te dicen estos objetos: en mi caso, los hierros, y a partir de aquí, crear. Es un juego, en el que vale todo, no hay reglas, aunque no todo es bueno. Ante todo la obra ha de tener equilibrio, vida. Transmitir sentimientos, y lo más importante: has de creértela. Es un juego, que empieza con la búsqueda de la materia prima: mis hierros, pero es un juego porque has de disfrutar buscando, manipulando, creando. Has de saber descartar, imaginar, retroceder, atreverte, transmitir, emocionar.
Si lo que haces, no transmite, no emociona, es que tus obras están muertas. La técnica es importante, pero lo es más el sentimiento.

Mis series
¿Por qué hago lectores? Creo que es un acercamiento a mi padre, ya fallecido. Él era un bibliófilo, y yo un “bala perdida”, y con los lectores creo que es una manera de acercarme a él, de demostrarle que sirvo para algo. Además, me gusta leer y los vendo, que en el fondo es muy importante. Me hubiese gustado que conociese mi obra, pero empecé en la escultura cuando él ya había muerto.
Los amantes. Siempre he sido muy enamoradizo, y al crear mis amantes, es una manera de homenajear a la mujer. Aunque mis amantes son muy indefinidos sexualmente, porque pienso que lo importante es el sentimiento, y también es una manera de sobrellevar las rupturas, recordando los momentos compartidos De aquí vienen las obras: “Momentos compartidos”, “Retazos de ti”. Son obras con muchos recuerdos.
Peces y veleros. El mar, siempre ha tenido mucha importancia para mí. Vilanova i la Geltrú, Cadaqués, Delta del Ebro, Costa Brava, Menorca.
No siempre la perfección es belleza. Creo que hay que dejar la huella del artista, pero también respetar el espíritu de los materiales usados. Se trata de: con algo que ha sido, hacer otro algo, que será otra cosa, y que al verla, nos producirá una reacción, de placer o disgusto, pero no indiferencia.
La idea. La idea es el mensaje, la imaginación, la herramienta de trabajo, y la sencillez su mayor virtud.
La premisa: lo bueno si breve, dos veces bueno, es perfectamente aplicable a mi escultura. Menos es más. Es tan o más importante el sintetizar, el mostrar el alma de la obra, que no la cantidad de horas empleadas en su realización.
Si me preguntáis, cuanto he tardado en hacer determinada obra, os diré, que toda una vida: varias guerras (El Salvador, Nicaragua, Irán), muchas muertes ante mis ojos, muchos viajes, muchas fotos, una costilla rota, tres operaciones de tendones (por ahora), y muchas toneladas de hierros movidos de un lugar a otro, trabajados, cortados, doblados, soldados, y luego, el milagro: LA OBRA.